Sueños

Ya que nadie publica hoy, lo haré yo, con una pequeña entrada sobre los sueños. Los que me conocen saben que soy un tipo de soñador diferente al del resto, también llamado loco, por la simple razón, de que siempre intento hacer que mis sueños se hagan realidad y para ello recurro continuamente a planes absurdos, estupideces e idioteces, que normalmente me alejan más de ellos y me condenan  a seguir soñando, día a día, con el propósito de lograrlo.

De los sueños, que es una cosa abstracta y subjetiva, solo tengo una cosa clara y es que yo, al menos sin ellos, no tendría motivación alguna, solo el hecho de querer cumplirlos es lo que cada mañana me hace levantarte y repetirme una y otra vez la misma frase, frente al mismo espejo mientras me miro a mismo. Me repito que sino lucho por ello, no soy digno de hacer mis sueños realidad y que si en medio de mi esfuerzo por conseguirlos, abandono, entonces tanto esfuerzo no habrá tenido sentido.

Hace poco, hablando con un amigo por una calle céntrica de mi ciudad, llegué a la conclusión, de que no siempre se puede conseguir todo, de que no siempre ganamos en la pelea, pero también llegué a otra conclusión, quizás la más importante de aquel día de charleta y largas conversaciones sin sentido alguno, y la conclusión es bien simple: "Mientras hay vida, hay esperanza".

Siendo realistas, con esa frase se puede llegar a interpretar que todo se consigue, pero no es así, es más, pocas cosas se consiguen y quizás no siempre se consiguen las más importantes para nosotros. Ciertamente cumplir los sueños es una utopía, una locura difícil de llevar a la práctica, lo intentamos y fallamos una y otra vez por culpa de esa esperanza aunque muchas veces es más fácil seguir intetándolo que admitir que hemos perdido en la carrera por conseguir nuestra meta.

Creo que a todos nos enseñaron nuestros padres que debíamos luchar por lo que queríamos y esforzarnos, aunque, hoy en día, solo veo miedo, tanto a conseguir los sueños como a luchar por ellos, gente que deja escapar oportunidades de viaje, estudio, trabajo..., solo por el hecho de que es más fácil siempre mantener una vida pasiva que complicarnos la vida durante el camino para conseguir el objetivo.

De igual manera, no importa nada, lo único que importa, desde mi punto de vista, es llegar a ser uno de esos locos que sueñan despiertos y uno de esos locos que en su último aliento dirán su último pensamiento, como si tras de él, fueran a salir cientos de ellos más, como si el camino allí no acabara, como sino hubiera hecho nada más que empezar.

Perdonad mi falta de expresividad pero no puedo transmitir lo que pienso en letras y que estás luego tengan sentido, es el problema de ser un soñador.

Y para terminar una canción, que a mi personalmente me encanta, es de un rapero zaragozano apodado Sharif.